Los tiempos están cambiando. Formamos parte de un mar de cambios y nuestros sistemas de modelos (culturales, sociales, educativos…) se están desmoronando y es hora de que surja algo nuevo.
¿Te atreves a ser diferente y original?
Está en la naturaleza humana evitar cambiar hasta que las cosas se ponen feas y nos sentimos tan mal que ya no podemos seguir como de costumbre.
A menudo tenemos que sufrir una crisis, un trauma, una pérdida, una enfermedad o una tragedia para ponernos a analizar quiénes somos, qué estamos haciendo, cómo estamos viviendo, qué estamos sintiendo y en qué creemos para cambiar de verdad.
Cuando esto ocurre empezamos a realizar cambios positivos para nuestra salud, relaciones, profesión, familia…
Pero mi pregunta es: ¿Por qué esperar a que esto ocurra?
Podemos aprender y cambiar en un estado de dolor y sufrimiento o evolucionar en un estado de felicidad e inspiración. La mayoría hacemos lo primero. Para elegir lo segundo sería concienciarnos de que el cambio seguramente conllevará una cierta incomodidad, algunos inconvenientes, una alteración en nuestra rutina habitual y una etapa de desconocimiento e incertidumbre.
Si reflexionas fríamente, alejado de las emociones, verás que nada es totalmente bueno, ni totalmente malo. Si se cierra una puerta se abrirá otro camino. Todo cambia, todo pasa, todo se reinventa y solo tú eliges como vivirlo.
Con amor, Laura.